Los meteoritos son los fragmentos de rocas extraterrestres que
sobrevivieron el paso a través de la atmósfera terrestre y llegaron a
la superficie de la Tierra. Parte de las estrellas fugaces que a
diario se pueden observar corresponden a material extraterrestre que
cae y se evapora antes de tocar tierra (porque son de tamaños
pequeños). Ahora, estas rocas extraterrestres provienen en su mayor
parte del Cinturón de Asteroides, ubicado entre la órbita de Marte y
Júpiter, pero también pueden provenir de Marte o de la Luna, y
eventualmente de cometas. Por lo tanto corresponden a muestras
aleatorias de esos cuerpos que nos permiten estudiar desde las
primeras fases del colapso de la nebulosa que dio origen al Sistema
Solar, pasando por la acreción del polvo y gas primitivos que
constituyeron los bloques básicos que formaron posteriormente los
planetas, hasta las fases más avanzadas de la diferenciación
planetaria que generó la estratificación radial en núcleos metálicos,
mantos silicatados densos y cortezas livianas. También permiten
estudiar el origen del agua, de las atmósferas planetarias y de la
vida.
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